AL DESAMOR DE MI VIDA
No
sé cómo empezar a escribir esta despedida, sin poder leerla tú. Nunca jamás en
la vida pensé, que tuviera que hacer esto, nunca me habría imaginado esta
situación:
Hola,
hoy te escribo desde lejos, bastante lejos y no hablo de kilómetros, hablo de corazón. A día de hoy nuestros caminos
están separados, muy separados, lo puedes llamar destino, dios, nuestras
acciones…. A veces la vida es muy cruel con nosotros mismos. A día de hoy, no
se nada de ti, nada, lo cual me hace estar intranquilo y a la vez raro, es una
sensación extraña, como cuando sales de noche y te pega el frío en la espalda,
esa sensación tan poco agradable. A día de hoy sigo haciéndome muchas preguntas,
sigo cuestionándome todo lo malo que pasó, sigo preguntándome por qué y sigo
sin saber por qué, y es que las respuestas me las dará el tiempo. Mi cabeza da
muchas vueltas sobre ese tema.
Por suerte mi cabeza dice que estás bien,
ojala.
Se
podría decir que teníamos una bonita relación. Una relación donde había risas, buenos momentos, momentos tensos,
viajes, fotos, risas muchas risas. Aun recuerdo tu sonrisa al verme aparecer,
esa puta sonrisa preciosa, esas ganas de querer verme, abrazarme y besarme y te
juro por todo el oro del mundo que no la olvidaré nunca. Éramos tan felices
juntos, que me olvidé de ser feliz por separado,
con ello una parte de mi corazón se fue
contigo, y jamás regresará. Eso es el
amor ¿no? Entregarte al máximo, pero ¿para qué?
Después
de un largo periodo de tiempo, contigo, y ahora después de un periodo (corto de
tiempo, pero largo para mí) puedo, debo y mereces que te dé, de forma
definitiva tu espacio, mereces ser feliz sin mí, tu lo elegiste, quiero verte
feliz. Por mi parte, a partir de esta carta, conseguiré salir de este punto en
el que estoy bloqueado, y conseguiré avanzar. Por mi parte, conseguiré ser
feliz con los mios, avanzaré y aprenderé mucho.
Solo
me queda darte las gracias, por hacerme la persona mas feliz del mundo, por
todos los momentos de risas, abrazos besos y escapadas a escondidas. Por todas
nuestras risas y sobre todo por darme la oportunidad de conocer a una familia
MARAVILLOSA. Gracias de verdad, de corazón, siempre te estaré agradecido por
haberme enseñado lo que es el amor
Quizás
el destino vuelva a juntar nuestros caminos, o quien sabe, quizás nunca, sé
feliz, te prometo que yo lo seré.
Comentarios
Publicar un comentario